Terapias

Terapia

Cognitivo Conductual

Este enfoque, surgido en la década de los 70, estudia la interrelación entre pensamientos, emociones y conductas, y cómo el cambio en uno de sus componentes, afecta directamente a los otros dos. Diversas investigaciones muestran su eficacia, y a día de hoy es la terapia que cuenta con mayor apoyo empírico, en una gran variedad de trastornos como la depresión, la ansiedad, los ataques de pánico, el trastorno obsesivo compulsivo y las fobias, entre otros.

Algunas de las técnicas de intervención que se utilizan en este tipo de terapia son: la reestructuración cognitiva, estrategias de afrontamiento y solución de problemas, desensibilización sistemática, entrenamiento en relajación, técnicas de exposición, técnicas para la adquisición, mantenimiento y reducción de conductas, técnicas de modelado y entrenamiento en habilidades sociales.

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Terapia

Familiar Sistémica

En este enfoque, surgido en EEUU en la década de los 50, la unidad de análisis no es el individuo, como ocurre en las orientaciones más tradicionales, sino que analiza el sistema familiar, como un todo.

Bajo la noción “el todo es más que la suma de sus partes”, se trabaja con la familia, como un sistema estructurado e interdependiente, que se comunica a través de unas pautas de interacción, y donde el individuo sólo es uno de sus componentes. De esta manera, los síntomas ya no son vistos como propios del individuo, sino como parte del patrón comunicacional de la familia. Por lo que la intervención terapéutica está dirigida a cambiar estos patrones, que en ocasiones resultan desadaptativos.

Autismo

Terapia

Tercera Generación

Las terapias de orientación conductual han ido evolucionando a lo largo de la historia, dando lugar a 3 generaciones u olas distintas. Las Terapias de Tercera Generación, surgidas a finales de la década de los 90, son las más recientes, y reúnen una serie de características que las distinguen de sus predecesoras:

  • Enfatizan la importancia del contexto en la conducta del individuo. Que incluye tanto su historia personal como su entorno.
  • Desarrollan un análisis funcional de los fenómenos psicológicos. Partiendo de la premisa de que cada una de las conductas que realiza un individuo, cumple una función para él.
  • El principio terapéutico no es la lucha por una reducción de los síntomas, sino que está enfocado al cambio en el modo de percibir los problemas por parte del individuo.

El Mindfulness o atención plena, es una práctica muy extendida en la actualidad, en las terapias de tercera generación, que consiste en cultivar la atención consciente de las cosas que ocurren dentro y fuera de nosotros mismos, sin reaccionar ni juzgarlas. “Vivir el aquí y ahora”, nos invita a ser conscientes y disfrutar en presente de nuestras experiencias, evitando las distracciones, y desconectando del pasado y del futuro.

El propósito de esta práctica es dejar de vivir en “piloto automático” y responder de una manera más consciente. Así como, prestar más atención a las experiencias sensoriales, pensamientos y emociones, sin reaccionar ni juzgarlos, para alcanzar un mayor conocimiento de nosotros mismo y de nuestro entorno.